Miriam De Paoli: "Nuestra vida es el resultado de las elecciones que realizamos"

El climaterio permanece oculto en gran medida dentro de la sociedad, y aún más en el entorno laboral. No obstante, para las mujeres que están en esta etapa, su presencia no pasa inadvertida y muchas de ellas experimentan su impacto significativo en su vida profesional.

El climaterio impacta principalmente a personas a partir de los 40 años, aunque existen casos excepcionales en individuos más jóvenes. Un estudio realizado en el Reino Unido en 2019 reveló que 900,000 mujeres renunciaron a sus trabajos debido a los síntomas de la menopausia. Esta cifra significativa es algo que el mundo no puede ignorar.

No obstante, en el panorama actual, surgen iniciativas como No Pausa, una organización y startup latinoamericana que busca dar visibilidad y ofrecer soluciones para el climaterio/menopausia. Este período de la vida de las mujeres es visto como una oportunidad significativa por esta organización. Su fundadora, Miriam de Paoli, una periodista e innovadora social con una amplia trayectoria en medios, comunicación estratégica organizacional y gestión en el tercer sector, plantea la posibilidad de desencadenar el potencial de este grupo y considerar que tanto hombres como mujeres pueden desempeñar un papel de enlace, una especie de puente, que facilite una transición beneficiosa entre generaciones con historias ricas.

“Los desapercibidos son aquellos que presenciaron la transformación del mundo y lograron ajustarse a la revolución tecnológica; conservan la memoria de lo que ya no existe y tienen la convicción de que pueden prosperar en lo que está por llegar. En la actualidad, se encuentran en plena madurez y ocupan roles de gran relevancia en sus empleos”, explica de Paoli.

Desde SilverLAC.co pudimos conversar con Miriam, quien, además, es autora de los libros “Cultura de la Influencia, La fuerza suave que está moldeando una nueva sociedad” y” Generación Invisible, Ni jóvenes ni viejos: cómo y cuándo perdimos el liderazgo”,

Para comprender mejor sobre este tema, de Paoli nos comparte lo siguiente:

¿Cómo defines la economía plateada?

Se refiere al gasto efectuado por individuos mayores de 50 años. Durante un tiempo, se usó "economía plateada" para describir el gasto de quienes superaban los 65 años y eran apreciados por su relación con los Silver Economics. Sin embargo, en realidad, abarcamos todo el gasto realizado por personas mayores de 50 años, y creo que esto tiene mucho sentido. Porque a partir de los 50 años, surge una reconsideración personal, financiera y económica, lo que, naturalmente, influye en nuestros hábitos de consumo.

¿Por qué Miriam de Paoli decidió involucrarse o decidió acceder a todo este tema de la economía plateada?

Me gustaría compartirles una historia, una especie de épica personal, que es probablemente bastante común entre los emprendedores en el ámbito de la economía planteada. Tuve que enfrentar un dolor intenso que atravesó mi vida y para el cual no encontraba soluciones. En lugar de quedarme inmóvil, decidí enfrentar la situación de frente. Así es como surgió No Pausa, mi startup que se dedica a desarrollar soluciones para mujeres.

Al comenzar a trabajar con el climaterio y la menopausia, descubrimos un concepto que nos entusiasmó mucho. Queríamos abordar la economía que rodea a las mujeres de entre 45 y 55 años, en esta etapa tan crucial de sus vidas. Cuando hablamos de economía de mercado, solo en productos de belleza, nos encontramos con una demanda insatisfecha de US$600 mil millones. Nos dimos cuenta de que, incluso después de algunos años, cuando las mujeres llegan a la etapa de la postmenopausia, todavía carecían de productos y servicios adecuados.

Fue entonces cuando empezamos a incorporar una perspectiva de género, ya que la mayoría de las personas que atraviesan esta etapa se identifican como mujeres. Aunque también contamos con una pequeña cantidad de hombres trans en nuestra comunidad, la realidad es que este es un asunto principalmente femenino. Descubrimos que la economía planteada se entrelazaba significativamente con nuestra economía climatérica. Este descubrimiento amplió aún más el espectro de nuestro análisis.

Lo que me cautivó por completo es que hay una falta notable en hacer que este tema sea atractivo y relevante, que sea visto como algo genial y atractivo. Me encanta pensar en la posibilidad de que cualquier persona que esté escuchando cierre los ojos e imagine a alguien de 60 años. Cuando abran los ojos y miren a las personas a su alrededor que tienen 60 años, es probable que noten que la imagen no coincide con las personas que están viviendo esa etapa.

Este desajuste no solo sería curioso, sino que también tiene un impacto en cómo se nos percibe en los negocios. Afecta la creación de productos y servicios, e incluso la inclusión o exclusión en la publicidad. Mi interés en la economía planteada surge de un dolor personal que, al final del día, se cruza con el edadismo, que es el prejuicio hacia nuestra perspectiva futura. Lo contrario de envejecer es morir, lo que significa que deberíamos celebrar el envejecimiento. Sin embargo, estamos lidiando con uno de los mayores desafíos de la sociedad. Envejecer como mujer es una experiencia que merece ser abordada y discutida.

Hoy en día, existen diferentes generaciones que se están reinventando, sobre todo, en necesidades de créditos, ahorros, consumo, etc. Pero, ¿Qué pasa con todas aquellas que todavía cuentan con ese poder adquisitivo?

Me parece fascinante tu pregunta, realmente lo es, ya que es la gran cuestión que nos planteamos constantemente cuando se trata de abarcar generaciones y productos financieros. Recientemente, realizamos un estudio en Uruguay que reveló que el 80% de las cuentas bancarias más grandes pertenecen a clientes mayores de 60 años. Sin embargo, es curioso que a pesar de ser quienes poseen más recursos, no se piensa en generar una cartera de productos y servicios específicamente orientados a esta generación.

En el ámbito financiero, las instituciones siguen compitiendo para atraer a los segmentos más jóvenes y menos acomodados, lo cual carece de sentido desde cualquier perspectiva que se le mire. Por otro lado, estas mismas instituciones financieras tendrán que replantearse su enfoque rápidamente. Esto se debe a que la expectativa de vida en la mayoría de los países de América Latina está aumentando, excluyendo desafortunadamente a las personas en situaciones de vulnerabilidad, que pueden ver variaciones considerables. La expectativa de vida podría incrementarse en hasta 20 años, rondando los 80 años en total.

Resulta paradójico que muchas instituciones otorguen créditos solo hasta los 50 años, cuando la edad promedio en que las personas se reinventan y emprenden es a los 48 años. Evidentemente, aquí hay algo que no encaja. Como sociedad, necesitamos tener conversaciones serias al respecto. Si no es por razones de impacto social, entonces al menos debería considerarse desde una perspectiva económica. Las instituciones financieras están dejando escapar una oportunidad sumamente lucrativa, ya que estos consumidores están ávidos de productos y servicios diseñados específicamente para ellos.

Puedes pensar: ¿Cuáles son las necesidades? Y te darás cuenta de que hay una gran diferencia al considerar las necesidades de un consumidor de productos financieros de entre 50 y 60 años, en comparación con un milenial, por ejemplo. Empieza por las letras: cuando buscas un producto financiero, deseas que se adapte a tu momento actual. Por lo general, estás pensando en el futuro, ya sea en la jubilación o incluso en emprender. No quieres que te miren como algo extraño si deseas emprender a los 55 o 60 años.

Estamos en medio de un cambio de paradigma. No creo que una hora o incluso un podcast de media hora sean suficientes para resolver esto, pero es esencial que tanto la sociedad civil como las corporaciones comiencen a entender que este cambio es inevitable. Tenemos que abordar los desafíos, pero al mismo tiempo, no podemos olvidar las oportunidades que surgen con el aumento de la expectativa de vida y las posibilidades que se presentan. La economía planteada ha estado demasiado enfocada en resolver problemas y desafíos, olvidando todas las oportunidades que surgen de este aumento en la longevidad.

¿De qué trata No Pausa?

Permíteme compartir con ustedes acerca de mi emprendimiento en América Latina. Estamos presentes en cuatro países latinoamericanos y nos dedicamos a crear productos y servicios que mejoren la calidad de vida de las mujeres que atraviesan el climaterio. Me gustaría introducir un dato que muchas personas pasan por alto, incluso siendo el 51% de la población: la menstruación llega a su fin en algún momento de nuestras vidas. La menopausia es una etapa en la vida de la mujer que trae consigo numerosos cambios. Si se está bien informada, no es necesario que estos cambios impacten directamente nuestra calidad de vida. Sin embargo, lamentablemente, aún no hemos llegado a ese punto.

Aquí es donde entra en juego nuestra plataforma, cuyo nombre quizás no suene muy emocionante, pero es tremendamente útil. Esta plataforma acompaña a las mujeres a lo largo de su climaterio, proporcionándoles un informe detallado sobre en qué fase se encuentran. Además, ofrece orientación sobre qué preguntas hacerle a su médico, cuáles son las soluciones para sus síntomas, qué análisis médicos podrían ser útiles y qué suplementos podrían ser beneficiosos. Es un punto de partida esencial para forjar el camino hacia la persona que queremos ser en nuestras etapas de 70 u 80 años.

Estamos a punto de lanzar nuestra primera plataforma integral de atención a mujeres en esta etapa. En ella, ofreceremos consultas con médicos especializados, charlas, entrevistas, cursos, grupos de apoyo y discusión. Descubrimos algo sumamente interesante: esta etapa se debe vivir en comunidad, no en soledad, como ha sido hasta ahora.

Siguiendo el hilo de la economía planteada, nuestro emprendimiento en esta esfera se llama No Pausa. La novedad más emocionante es que su nombre, "No Pausa", refleja su objetivo con claridad: queremos que las mujeres tengan una respuesta clara como el agua para vivir con calidad de vida cuando llegue su momento. Esa es la razón detrás de nuestro emprendimiento: apoyar a todas las mujeres en esta etapa crucial de sus vidas.

¿Cuál es tu opinión sobre qué oportunidades tiene la tecnología para la economía plateada?

Toda la economía planteada del futuro convergen y tienen su base en la tecnología. Una vez más, surge el tema de los sesgos. Una persona de 55 años ha vivido prácticamente toda su vida laboral en un contexto donde la tecnología ha sido una constante. Claro, es necesario hacer una distinción entre lo rural y lo urbano, y considerar si tuvo empleos en ambientes tecnológicos. La realidad es que, en muchos casos, esta persona ha estado rodeada de tecnología. La noción de que alguien de 50 años en cualquier trabajo no ha interactuado con una computadora es errónea. Incluso durante la pandemia, el 70% de las personas mayores de 70 años se conectaron de alguna manera a través de plataformas para comunicarse con sus familias. La pandemia aceleró este proceso, ya que muchas personas no se conectaban porque no veían la necesidad, pero la situación actual les mostró que podían hacerlo.

La idea de que la mayoría de las decisiones para adoptar la tecnología provenía de la sociedad más que de ellos mismos es cierta en muchos casos. Muchos decían: "No lo necesito" hasta que se vieron en la situación de tener que usarlo, y lo hicieron de manera asombrosa. Muchas personas de 60, 70 u 80 años continúan usando aplicaciones bancarias en lugar de acudir físicamente al banco, lo cual es un gran avance. Sin embargo, es importante destacar que la protesta también es válida en parte, pero no es la historia completa.

Debemos superar la idea de que las personas mayores de 50 años son simplemente "adultos mayores", ya que esto no refleja la realidad. La transversalidad y la interseccionalidad juegan un papel importante en este panorama. No se trata de un único grupo homogéneo. Existen diversidades y múltiples identidades que son significativas en este contexto. Estamos hablando de un rompecabezas complejo en el que tenemos muchas piezas que debemos reorganizar. Esto se debe a cambios significativos en nuestra sociedad, como el cambio demográfico que ha estado ocurriendo durante al menos 20 años. Este cambio demográfico incluye tanto a personas vulnerables como a nuevas oportunidades y desafíos.

Además, otras dos variables entran en juego: la intergeneracionalidad y la interseccionalidad. Nada es uniforme. No puedo afirmar que todas las mujeres de 50 años sean iguales. Hablamos de diversidad y, con frecuencia, las diversas identidades son grupos lo suficientemente significativos como para no ser considerados como una entidad única.

Hoy en día, todo el marketing que existe va orientado a preservar la juventud. Existen niñas que le tienen miedo a las arrugas y a las canas, lo ven como algo negativo, ¿Por qué no lo podemos vivir con plenitud?

Un aspecto fundamental para considerar es el tema de la comunicación. Todos somos individuos cuyas percepciones están moldeadas por lo que nos han comunicado, pero afortunadamente, este panorama está experimentando un cambio cada vez mayor. Como mencionabas, incluso el propio mercado está reconociendo que enfocarse exclusivamente en los más jóvenes no es suficiente, ya que también se está hablando a personas con un poder adquisitivo limitado.

En efecto, me gustaría poder contradecir esto, pero desafortunadamente, en un período de tiempo relativamente breve desde la Segunda Guerra Mundial, hemos presenciado un cambio en el poder. Cada vez más, los propios mercados están comprendiendo la importancia de la diversidad que mencionábamos anteriormente. Se dan cuenta de que, a medida que esta diversidad aumenta, también se amplía el mercado potencial. Me impactó la frase que mencionaste: "Hay que entender para atender". La encuentro muy poderosa y la voy a recordar, aunque te daré el crédito correspondiente. De hecho, esta idea encaja perfectamente con un principio fundamental en emprendimiento e innovación que nosotros también aplicamos.

¿Cuál debería ser esa estrategia para fomentar un envejecimiento activo y productivo?

Es crucial reconocer que el proceso de envejecimiento no se trata simplemente de percatarnos cuando alcanzamos los 80 años. El envejecimiento productivo y activo surge de tomar decisiones acertadas a los 40 años, así como en los 50, 60, 70 y 80. Nuestra vida es el resultado de las elecciones que realizamos a lo largo de nuestro recorrido. Aquí no se trata de personas con una genética excepcional que puedan envejecer sin tomar decisiones informadas. Al considerar el mercado de la economía plateada, podemos diferenciar entre una vejez activa y una pasiva, y para mantenernos activos tanto física como cognitivamente, necesitamos tomar decisiones conscientes.

Por lo tanto, comprender el papel del ejercicio, adoptar una alimentación consciente y entender que la salud sexual es parte integral de un envejecimiento saludable son decisiones fundamentales. Llegar a una edad avanzada con vitalidad es el resultado de un cúmulo de elecciones acertadas. Por esta razón, la información y el diálogo son esenciales. No se pueden tomar decisiones acertadas si no sabemos qué decisiones debemos tomar. Por lo tanto, es crucial desterrar la idea de envejecer como un proceso pasivo para poder maximizar su impacto positivo en nuestras vidas.

Aquí también surge la dimensión estética. Sin embargo, todos tenemos percepciones distintas sobre la estética. A veces, lo que parece sencillo para uno puede resultar complejo para otro. Necesitamos practicar la escucha activa y comprender cómo el paso del tiempo afecta de manera única a cada individuo. Debemos abandonar la noción de una perspectiva unidimensional.

En el mundo del emprendimiento, hay muchas oportunidades y espacio para la innovación. Hay mucho por hacer en relación con la economía plateada. Como en toda nueva temática, enfrentaremos desafíos, pero también encontraremos oportunidades. La mayoría de las personas están explorando estas áreas de manera pionera, lo que puede presentar dificultades, pero definitivamente vale la pena el esfuerzo.

Exactamente, no estamos idealizando la situación en absoluto. Permíteme aclarar que no estoy sugiriendo que este proceso sea un simple paseo por el bosque, ni mucho menos. Lo que me gusta destacar es que, si bien existen desafíos, también hay oportunidades. Creo que hemos pasado por décadas en las que nos hemos centrado tanto en los desafíos que nos hemos olvidado de las oportunidades. Este equilibrio es lo que hace que abordar este tema sea poderoso y relevante para la agenda actual. Las oportunidades también están ahí y son significativas.

Por lo tanto, los invito a considerar este panorama de manera integral. Para aquellos que están más allá de cierta edad, no estoy negando la existencia del estigma o la discriminación. Lo que quiero expresar es que existe otro aspecto igualmente importante que merece atención. Si no empezamos a enfocarnos en estas oportunidades, que son valiosas para nuestro propio mercado, nunca alcanzaremos el nivel de poder que merecemos y deseamos. Es imperativo que reconozcamos ambos aspectos.

Necesitamos abordar todos los elementos de esta etapa de vida. Es posible transformarla en algo que sea considerado "cool" y "sexy". La clave radica en abordar tanto los desafíos como las oportunidades de manera integral y equilibrada.